EL REY NACIÓ

Mateo 2:1-3

En nuestros días hemos sido testigos de como la navidad se ha convertido en una época en la cual el centro de la celebración se ha distorsionado hacia los regalos, las luces, las fiestas, la cena, la reunión familiar, Santa Claus, los viajes, la mercadotecnia y el consumismo, y en miles de hogares aparentemente Cristianos se tiene como costumbre celebrar a un indefenso niño nacido de una virgen rodeado de animales y puesto en un pesebre como una figura meramente religiosa. Sin duda alguna, con el paso del tiempo poco a poco se ha ido perdiendo el sentido del texto Bíblico que exalta a Jesús como el REY que ha nacido. Porque este Jesús del cual Mateo nos relata las condiciones en la cuales se hizo hombre es el mismo Jesús del cual Juan le describe en Apocalipsis 19:16 como el Rey de Reyes y Señor de Señores; por lo tanto, veremos a través del texto Bíblico que quien está naciendo en Belén es el REY, tal vez no a la manera que muchos estaban esperando, pero sin duda alguna el REY que necesitábamos.

En primer lugar veremos que Jesús es el Rey Eterno, cuyo reinado no tiene principio ni tendrá jamás un fin, El es y será por siempre el Rey. Así que si vamos al texto Bíblico en el evangelio de Mateo 2:1 dice la Escritura que Jesús nació en Belén de Judea, y la primera pregunta que yo haría al texto es porque en Belén? Cual es la razón de que este capítulo 2 inicie dándonos el lugar de su nacimiento, sin lugar a dudas este dato es de suma relevancia, y la respuesta la encontramos aproximadamente 725 años atrás de que este glorioso nacimiento ocurriera, cuando el profeta Miqueas dijo “ Pero tú, Belén Efrata, pequeña para estar entre las familias de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel; y sus salidas son desde el principio, desde los días de la eternidad.” Miqueas 5:2. El profeta nos está diciendo 725 años antes que en esta pequeña ciudad va a nacer el Rey y Señor y que reinará sobre Israel, lo interesante de esto es que este Rey eterno no escoja una gran ciudad para su nacimiento, o un suntuoso palacio donde la lógica humana nos dicta que debe nacer un rey de tal magnitud. No, este Rey decide nacer en una pequeña ciudad, en las más humildes y sufridas condiciones porque desde su nacimiento nos está anunciando que viene dispuesto a sufrir y a pagar el precio por nuestro rescate, este Rey nos habla desde su nacimiento que vino a la tierra con el propósito de sufrir y pagar por nuestros pecados, entregándose por completo y despojándose a sí mismo y entregándose hasta la misma muerte para saciar la justicia de Dios Padre que demandaba un castigo a consecuencia de los pecados de toda la humanidad de aquellos días, de los que antecedieron a estos y los días que han de venir. Para que todo aquel que cree en este REY Eterno, en cualquiera de las eras de la humanidad, no se pierda, más tenga vida eterna. Este Rey eterno es aquel quien describe el evangelio de Juan 1:1, que estaba desde el mismo principio, El es el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Por quien fueron hechas todas las cosas; y sin El nada de lo que es hecho, fué hecho. Jesucristo es este Rey Eterno, el Verbo, y aquel Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros, y vimos su gloria, gloria cómo del unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.

En segundo lugar veremos que aquel niño que está naciendo en Belén es el Rey que reina sobre toda autoridad. Y lo vemos en la pregunta que hacen los magos de oriente en el versículo 2 de Mateo 2: ¿Donde está el Rey de los judíos que ha nacido?. Lo primero que tenemos que exponer en este tema es que aquellos magos no son del mismo tipo de los magos de nuestros días, para nada, por el contrario, la palabra mago proviene del persa ma-gu-u-sha que significa sacerdote estudioso de las estrellas. De hecho según la concordancia Strong la palabra griega utilizada en el original es “máyoc”, que significa mago, es decir, científico oriental. Esto se puede incluso comprobar en algunas versiones de la Escritura como la versión Dios Habla Hoy o la Nueva traducción viviente donde en lugar de usar la palabra “magos” se utiliza la expresión “sabios de oriente” debido a que en nuestros días la palabra mago ha adquirido con el tiempo otra connotación, en nuestros días un mago es alguien que entretiene por medio de trucos a un grupo de niños, o alguien que practica la magia negra, pero en aquellos días eran sabios científicos que estudiaban las estrellas para buscar a Dios. Pues a estos sabios que venían de oriente en un viaje de aproximadamente de más de 1.600 kilómetros según algunos estudiosos, Dios les permitió ver su estrella desde oriente y vinieron a adorarle. Su nacionalidad no era judía, pero vinieron a adorarle, porque reconocían la autoridad suprema del reinado del niño que había nacido, por lo tanto, estaban reconociendo que este Rey que había nacido no era solamente de los judíos, sino que era el Rey sobre todos los reyes de la tierra, de alguna manera Dios les permitió entender que este Rey era el Mesías prometido, y sus presentes hablan tanto o aún más que sus palabras, oro, el cual se ofrece a los reyes, es el metal más valioso que representaba la realeza de Jesús. Incienso un elemento de adoración a la Deidad, representaba la divinidad de Jesús, y mirra utilizada para perfumar los cuerpos de los muertos antes de ser enterrados representando la naturaleza humana de Jesús quien había venido al mundo a morir para salvar a los pecadores. Sin duda estos sabios de oriente estaban reconociendo que este Rey que había nacido Reina sobre toda autoridad. 

En tercer lugar, veremos que aún cuando alguien se oponga a su reinado, Jesús sigue y seguirá siendo Rey. Y lo vemos en la continuación del versículo 3 del mismo capítulo 2 de Mateo. Vemos que Herodes se turbó, y toda Jerusalem con él. Y para entender su miedo y el miedo de toda Jerusalem es importante entender quien era Herodes; según el historiador Judío Josefo, Herodes probablemente no era Judío, sino que era originario de la región conocida como Idumea, es decir Edom, lo cual no era bien visto por nadie en el pueblo Judio, pero veremos como un no judío llega a ser rey. Y todo inicia cuando su padre Antípatro quien en el año 63 AC, cuando Roma toma el control de Judea, era gobernador en Edom e inicia una campaña para ganarse el favor de Roma y retener su posición y Roma le nombra procurador de Judea, con su posición y ganándose con favores políticos la buena voluntad del imperio, Roma nombra a su hijo Herodes en el año 40 a.C. como rey en Judea. Tan pronto sube al trono, Herodes entra en una incertidumbre y un miedo que le lleva a cometer actos crueles y malvados con el fin de defender su reino e impedir que le sea quitado, por ejemplo, manda a matar a sus predecesores y a todos los que les apoyaron, mató en total según Joséfo a cerca de 45 hombres en el 37 a.C. Mandó a estrangular al anciano Juan Hircano ll por un supuesto complot para derrocarlo en el 30 a.C. Mató a su cuñado Aristobulo en el 35 a.C.  porque pensaba que Roma lo podía favorecer como gobernador de Judea en lugar de el. En su paranoia se casa con una judía llamada Mariamne para supuestamente retener su reinado y ganarse el favor de los judíos, pero posteriormente la mata también por conspirar contra él en el 29 a.C. y no contento con eso manda a matar a dos de los hijos que tuvo con ella en el 7 a.C. porque quería borrar cualquier amenaza hacia su reinado, y sus propios hijos para él eran una amenaza. Y por último cinco días antes de su propia muerte manda a matar a su tercer hijo con Mariamne llamado Antipater. Era tal la maldad de aquel hombre que sabiendo que el pueblo no iba a lamentar su muerte, en sus últimos días manda a reunir a todos los líderes notables de Judea en el hipódromo de Jericó, y dejó órdenes expresas a los soldados de que cuando el muriera mataran a todos estos judíos y así asegurarse de que el día de su muerte toda Judea lloraría así no fuera por el. Este era el carácter de Herodes, un paranoico, usurpador, asesino y malvado, que cuando escucha a unos sabios de Oriente decir que vienen a ver al Rey de los Judíos inmediatamente se turba, se preocupa, y con él, todo el pueblo según el texto Bíblico, porque sabían de lo que era capaz de hacer con tal de retener su reinado. Y efectivamente empieza a indagar sobre donde podría estar ese Rey de los judíos con el fin de matarlo, pero aunque alguien se oponga a Su Reinado, llámese como se llame, NADIE puede destruirlo, y según el versículo 16 Herodes manda a matar a todos los niños menores de 2 años que había en Belén y sus alrededores con el fin de evitar que este Rey creciera, pero ya Dios tenía a salvo a Su Hijo en Egipto y luego de la muerte de Herodes regresaron a salvo. Porque aunque alguien se oponga a Su Reinado, Jesús sigue y seguirá siendo Rey.

Sin duda alguna Jesús es el Rey Eterno, que reina sobre toda autoridad y aún cuando se levanten contra Él, El sigue y seguirá siendo Rey de Reyes y Señor de Señores, tal cual lo expresa el apóstol Pablo en Filipenses 2:5 “Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por lo cual Dios también lo exaltó hasta lo sumo, y le dió un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, en la tierra y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesús es el Señor, para gloria de Dios Padre.”

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